El gran paraíso de las aves
Índice del artículo
- Parque Nacional de Monfragüe, un verdadero santuario para observar aves.
- Clima, Geología, Vegetación y Fauna
- El gran paraíso de las aves
- Ruta senderista: Arroyo malvecino - Cerro Gimio
- Rutas senderistas: Villareal - Castillo de Monfragüe
- Ruta senderista: Villareal - Mirador de la Tajadilla
- Otras rutas y mapa
- Rutas en coche
- Normas y comportamiento
Las aves son, sin ningún tipo de duda, el gran valor de Monfragüe que atrae a miles de visitantes con la intención de observar algunas de las especies de aves más buscadas en nuestro país. Y dentro de este importante grupo animal destacaremos a las rapaces.
Dos especies de rapaces son las más buscadas : el buitre negro y el águila imperial ibérica.
El buitre negro, el gran velero que aprovecha las corrientes térmicas para volar sin apenas gasto energético, tiene en Monfragüe su principal santuario. En estas sierras se asienta la mayor de sus colonias conocidas. Cada año más de trescientas parejas anidan cada primavera y cuidan de su único pollo.
El águila imperial ibérica es un ave más solitaria, uno de los superdepredadores con la que cuenta la pirámide trófica de Monfragüe. Su presa principal es el conejo, y la bajada del censo de estos roedores por enfermedades y otras causas provocan que la mayor rapaz del bosque mediterráneo se encuentre en una situación crítica. En la actualidad existen alrededor de doscientas parejas en la Península Ibérica, habiendo doce en la zona de Monfragüe.
El Alimoche visita cada primavera desde África para criar en los roquedos.
Otras aves de presa surcan estos cielos, águilas reales , perdiceras, halcones peregrinos, búhos reales, azores, gavilanes, milanos negros, águilas calzadas, culebreras, milanos reales, elanios azules, cárabos o mochuelos.
Aparte del grupo de rapaces, destaca otra ave que es objetivo de cámaras y prismáticos, la cigüeña negra.
Junto a estas aves, emblemas del Parque, encontramos infinidad de otras aves que dependiendo del medio que utilicen serán más o menos detectables. La garza real, garceta común o garzas imperiales). Patos azulones, cuchara o cercetas comunes y el cormorán.
En las sierras de Monfragüe podemos encontrar una legión de pajarillos que sería muy largo detallarlos.
En las dehesas, pastando, las razas autóctonas de ganado bovino: las vacas retintas o la rara blanca cacereña, esta última variedad en peligro de extinción. Las ovejas que predominan en la zona son las de raza merina. Y para finalizar con los mamíferos domésticos el cerdo ibérico, verdadero estandarte de la dehesa extremeña.
De los grandes depredadores, el lince ibérico con muy pocos ejemplares.
Mucho más abundantes resultan los carnívoros de tamaño medio: tejones, garduñas, ginetas. Entre los cánidos el único representante es el zorro. En los cursos de agua podemos observar nutrias.
Los mamíferos salvajes de mayor tamaño del Parque Nacional de Monfragüe son los ciervos (Cervus elaphus). La berrea otoñal atrae cada año a más visitantes en busca de estos animales en las dehesas que rodean el Parque.
Otro animal que se deja ver es el jabalí.