Los patrones del “Central Lechera Asturiana” superan más de tres horas de pruebas de fuerza
Quedan poco más de dos semanas para que los quince IMOCA Open 60 que disputarán la Barcelona World Race escuchen el bocinazo de salida de la Vuelta al Mundo; y ése es el tiempo que el equipo del “Central Lechera Asturiana” tiene para poner el barco a punto para el próximo día 31 de diciembre.
Y para lograr esta nueva meta, nada mejor que dividirse. Mientras una parte del equipo está centrada al cien por cien en el nuevo palo del ESP 23, el resto se dedica a las labores propias de un equipo que, por delante, tiene 25.000 millas por recorrer sin ninguna escala. Desde preparar la ropa hasta envasar al vacío la comida, a bordo del “Central Lechera Asturiana” tienen muy claro que no se puede perder de vista el objetivo final: disputar la Barcelona World Race.
- Midiendo la fuerza máxima
Hoy miércoles, día 15 de diciembre, Juan Merediz y Fran Palacio, patrones del “Central Lechera Asturiana” para la Barcelona World Race, se citaban con el doctor Benjamín Fernández en el Centro de Alto Rendimiento de San Cugat, donde esta mañana superaban múltiples pruebas de fuerza. Y es que por delante quedan tres meses de intensa competición, en un espacio reducido y en las condiciones más duras: desde el extremo calor del Ecuador hasta las gélidas aguas del Sur. Sin duda, los patrones sufrirán un gran desgaste físico.
Por ello, Merediz y Palacio se han sido sometido a múltiples pruebas isométricas durante más de tres horas para medir la fuerza máxima que cada uno posee en brazos, piernas y lumbares. Una vez finalice la Barcelona World Race, Merediz y Palacio volverán a pasar los mismos estudios para comprobar cuál ha sido la evolución. “Hemos preparado una tabla de ejercicios para mantenernos en forma y que el físico no se deteriore tanto durante estos tres meses en el barco. Viviremos en muy poco espacio y no nos podremos mover con normalidad, por lo que algunas zonas quedarán tocadas. La idea final es comprobar si esas tablas han funcionado correctamente” explicaba Merediz minutos después de salir de la consulta.
No cabe la menor duda, el “Central Lechera Asturiana” está viviendo una semana a contrarreloj.