La 44ª Solitaire du Figaro se despidió de Gijón con destino a Roscoff
Etapa larga de Gijón a Roscoff a través de la isla de Yeu! Salida de la capital marítima asturiana con viento debil o ausente en el centro de la Bahía de Vizcaya. la flota reagrupada en los primeros compases de la etapa.
No hay nada más difícil de predecir que una meteo tranquila hablando de navegación en regata, donde estará la brisa o el pozo viento. No hay nada más estresante para un navegante que definir la estrategia cuando la incertidumbre es total. Nada es más incierto cuando los modelos matemáticos son como los que tienen los figaristas para esta noche ganando norte por el Golfo de Vizcaya. Y esto ocurrió en la mañana de este jueves, cuando los 40 marinos que restan en regata intentaron sacar humo a su software para afrontar y navegar por las zonas de más presión proa a la a la isla de Yeu, a 230 millas de Gijón. Y Eolo como Yeu parecían tan invisible como la niebla que se elevaba en el último momento antes del inicio de la tercera etapa, para dar lugar a una brisa improvisada del norte-noroeste.
Al mediodía, el cañón tronó en en la gijonesa Bahía de San Lorenzo, un ida y vuelta de tres millas dominado por Vincent Biarnes que cruzó por delante de la flota amurado a babor. Detrás de él estaba el atasco, la proliferación de spinnakers formó una pared sin gota de viento que paraba a varios solitaria como Michel Desjoyeaux (TBS). El pelotón estaba denso y era necesario hacer algo, intentar salir. Yann Elies (Quéguiner Leukemia Group-Esperanza), incluso tuvo que sancionarse 360 ° en un compromiso en la llegada a boya.
De hecho, el frente que tenía que llegar a la costa asturiana en la mañana del jueves se tomó su tiempo y se acerca poco a poco a la flota tres horas después del pistoletazo de salida.
Habrá que esperar hasta el viernes por la mañana para ver si esta insoportable levedad del aire se ha mantenido durante toda la noche . Mañana más.