El Renault Captur se dirige a Nueva Zelanda para una parada técnica
El Renault Captur de Jörg Riechers y Sébastien Audigane, clasificado provisionalmente en cuarta posición de la Barcelona World Race, se dirige a Nueva Zelanda para una parada técnica en un puerto aún por determinar, para reparar la avería en la pala del timón ya conocida.
El dúo germano francés ha contactado con Dirección de Regata esta mañana, a las 7:45 horas UTC (las 8:45 en Barcelona), para comunicar su intención de hacer una parada técnica en Nueva Zelanda. Están unas 650 y 750 millas al sudeste de Invercargill y Wellington, respectivamente. Calculan que tardarán unos tres días en llegar a tierra.
Los skippers del Renault Captur se percataron el domingo por la noche de que la pala del timón de estribor estaba dañada, probablemente tras la colisión con un objeto flotante no identificado, y procedieron a repararla mediante la colocación de una funda rígida. Sin embargo, este martes de madrugada comprobaron que la reparación no era del todo fiable porque navegando amurados a babor a partir de 19 nudos de velocidad perdían el control del barco. Aunque ayer martes por la mañana señalaron que su objetivo era doblar el cabo de Hornos, durante esta noche han decidido volver atrás para afrontar el inmenso océano Pacífi co con más fiabilidad, ya que han detectado que también pierden el control del barco amurados a estribor.
“Tras hablarlo con el equipo técnico, tenemos que aceptar la evidencia. Para la seguridad del barco y de la tripulación, hemos decidido hacer ruta hacia Nueva Zelanda, adonde llegaremos en unos tres días. Durante este tiempo buscaremos soluciones para reconstruir la pala del timón de estribor”, han escrito esta mañana Jörg Riechers y Sébastien Audigane en un correo.
"Además del problema de la pala del timón -señalan también en el mensaje-, tenemos también un problema recurrente con nuestra quilla y ayer, además de la falta de estabilidad del barco, tuvimos que hacer reparaciones durante tres horas para poder mover la quilla después de la trasluchada, con la ayuda preciosa de Bruno [Behuret, miembro del equipo técnico] por teléfono -no ha dormido mucho esta última noche-".
“No abandonamos, intentaremos hacer la reparación –recalca Audigane-. Es evidente que es difícil tomar esta decisión, pero se trata de una cuestión de seguridad de los hombres y del barco. Tras mi experiencia en estos mares y en diferentes barcos, me parece totalmente inconsciente continuar con un barco que no tiene una dirección fiable y precisa. Sabemos que durante una parte del océano Pacífico el socorro en un caso de emergencia es muy difícil, casi inexistente […]. No queremos exponernos a romper la segunda pala por los esfuerzos importantes que va a soportar en estas condiciones. Los dos tenemos una familia, un equipo, un patrocinador y una organización de regata que nos apoya en nuestra aventura y se trata de no tomar riesgos irreflexivos”.
A bordo del Renault Captur, Riechers y Audigane navegan a una velocidad de 13 nudos con vientos del Oeste de entre 25 y 30 nudos de intensidad y con olas de cuatro a seis metros. Estas condiciones son favo rables para que naveguen rumbo al Norte; a medida que suban el viento irá disminuyendo. Actualmente llevan una configuración reducida de velas, con dos rizos en la mayor.