El Mediterráneo quiere frenar al Estrella Damm tras su galopada
El Estrella Damm recorta 80 millas al tercero y se prepara para el paso del Estrecho de Gibraltar, con fuertes vientos de Levante de hasta 100 km/h
Con el primero y segundo clasificados de la Barcelona World Race ya en la ciudad condal (el Mapfre cruzó la línea de llegada a las 11:17:35 hora peninsular española), todavía quedan importantes retos a los barcos que les siguen. En las últimas 24 horas, el Estrella Damm, cuarto clasificado, ha sido el más rápido de la flota, con 11,5 nudos de media y 275 millas recorridas hacia Barcelona. Esto le ha permitido recortar nada menos que 80 millas al Renault Z.E. entre las 11 de la mañana del lunes y del martes, reduciendo la desventaja a 151 millas.
El barco de Alex Pella y Pepe Ribes navega cerca de la costa oeste marroquí ascendiendo hacia el estrecho de Gibraltar tras virar al norte aproximadamente a las 8:30 de la mañana. Unas 35 millas les separan de este importante paso, que podría producirse durante la tarde-noche del martes. El Estrecho les espera con fuertes vientos de Levante de más de 40 nudos. Estas condiciones podrían acompañarles en el primer tramo mediterráneo hasta el miércoles, unidas a la siempre incómoda ola corta y alta del Mar de Alborán.
Enfrentarse a este temporal ha inspirado a Pepe Ribes a escribir esta madrugada un e-mail muy emotivo acerca de su mar, el Mediterráneo: “Fue hace unos noventa y tantos días cuando intentábamos salir del Mediterráneo, una noche sin viento con la corriente en contra en la que el mar nos chupaba hacia dentro como si no quisiese que lo dejáramos. Nos costó más de 24 horas pasar por el Estrecho”, comenzaba.
“Bueno pues ahora estamos a unas 60 millas de la entrada del Estrecho y parece que el mar Mediterráneo no quiere que entremos en él. Tenemos varios partes meteorológicos que nos dicen que tendremos 50 nudos de ceñida. De nuevo el mar Mediterráneo se muestra muy fuerte ante nosotros. Nosotros, que respetamos y apreciamos nuestro mar… Un mar en el que nos hemos criado, hemos aprendido a nadar, a navegar, a pescar en él desde pequeños, con el que hemos crecido... Creo que debe estar celoso de nuestras aventuras con otros océanos”.
Un día para marineros, no para regatistas
Ribes preveía que este martes podría ser uno de los días más duros de la Barcelona World Race: “Bueno, mañana un día duro como pocos… Uno más de esta vuelta al mundo que no nos está dando tregua. A ver si podemos encontrar una configuración que nos permita remontar de ceñida” -contra el viento-“el Estrecho con sus corrientes pero sobre todo con el temporal de Levante que hay anunciado y las olas cortas y verticales típicas.”
El patrón de Benissa confiaba en que el Estrella Damm aguantase bien este desafío y no les obligase a poner un rumbo a favor del viento para proteger el material: “Esperemos tener un poco de suerte y que nos respete el material y no se rompa nada que nos haga retroceder, ya que con ese viento y sin escapatoria atrasaríamos muchísimas millas si nos tenemos que poner de popa. Y a estas alturas, el material lleva ya muchas millas”. La conclusión del patrón del Estrella Damm era la de alguien muy acostumbrado a los afrontar los envites del mar con temple: “Otro día más de supervivencia donde nos tenemos que quitar la gorra de regatistas y ponernos el gorro de lana de marineros”. La velocidad tendrá pues que ceder su puesto a la seguridad en este cruce del Estrecho.