EL “CENTRAL LECHERA ASTURIANA” VOLVERÁ A LA COMPETICIÓN

Desde el primer momento, Juan Merediz y Fran Palacio junto al resto de su equipo, dejaron claro cuál era su objetivo en la Barcelona World Race: completar la vuelta al mundo. Ahora, y después de 86 días de regata, el equipo “Central Lechera Asturiana” ha anunciado que soltará amarras en la noche del domingo para el lunes, a las 00:00 GMT (02:00 hora española).

“Nuestro objetivo era y sigue siendo completar la vuelta al mundo. Como dice una canción mexicana: ‘lo importante no es llegar primero, sino que hay que saber llegar’. Tenemos muchas ganas de completar lo que hemos empezado” explicaba Juan Merediz, mientras que su compañero de aventuras, Fran Palacio afirmaba: “Nuestro equipo de tierra y directivo y la FNOB está poniendo todo de su parte para que podamos cumplir nuestro sueño. No tenemos palabras de agradecimiento para expresar todo lo que sentimos ante esta ayuda. Hemos trabajado con los mejores”.

Ante todo, seguridad
Sin lugar a dudas, ha sido una de las decisiones más complicadas de tomar ya que, mientras por un lado el corazón dicta que hay que seguir; por el otro la cabeza planteaba mil y una complicaciones. La decisión final vino marcada por las últimas comprobaciones que demostraron que, tras la reparación del palo, el “Central Lechera Asturiana” es cien por cien fiable y seguro.

“Durante este tiempo todo el equipo tenía algo muy claro: no podíamos asumir más riesgos que los propios de una vuelta al mundo y no vamos a asumir más riesgos de los que hubiéramos asumido antes de la desarboladura” explicaba Merediz mientras contenía el nerviosismo propio de una última cena en tierra antes de volver a competir al cien por cien. Pero el asturiano, consciente de la situación, añadía: “Sabemos que hasta Barcelona queda mucho camino y cualquier cosa puede volver a pasar, pero también puede pasarle al resto de barcos que están navegando”.

Afán de superación y deportividad
Está claro, Merediz y Palacio –así como el resto del equipo- han demostrado una vez más su afán de superación y deportividad. “Ante todo somos deportistas. Si en una regata barlovento-sotavento haces una mala salida sigues hasta el final intentando hacerlo lo mejor posible. Aquí es lo mismo, no importa la posición final sino completar la vuelta al mundo y llegar a Barcelona” explicaba el tándem asturiano. Sin duda, un espíritu vueltamundista digno de quitarse el sombrero.