D+14: Desde el sur de Canarias hasta la mitad del Atlántico Sur

Notición en la flota de Vendée Globe: Alex Thomson se enfrenta a importantes problemas estructurales en su HUGO BOSS. El británico, ayer en 2ª posición, 40 millas en el espejo de popa de Thomas Ruyant , desaceleró considerablemente, dejando que sus oponentes le pasaran para reparar un bao (refuerzo estructural) cerca de la proa de su IMOCA, y ya está a 200 millas por detrás. Al mismo tiempo, Thomas Ruyant subía al mástil para reparar sus problemas de drizas. Además del clima estratégicamente complicado, los capitanes manipulan y operan controles draconianos en sus IMOCA ... El sur profundo no está tan lejos.
Thomson alertó a su equipo sobre el problema alrededor de las 1900 UTC del sábado por la noche después de que una inspección de rutina generó preocupaciones inmediatas mientras navegaba hacia el sureste en su ruta al Índico, a unas 850 millas al este de Río de Janeiro.

Con la inminente necesidad de iniciar su parte del recorrido por el océano austral durante más de un mes en las inhóspitas aguas entre el Cabo de Buena Esperanza, Cabo Lewuin y el Cabo de Hornos, el patrón británico de 46 años querrá tener plena fe en las reparaciones y en su IMOCA. Pero una declaración emitida por su equipo esta mañana confirma que tiene los materiales y los métodos para realizar las reparaciones necesarias y apunta a volver a la ruta lo más rápido posible.

“Alex ahora ha puesto el barco en una posición segura para gestionar el estado de la mar con el fin de reducir el movimiento a bordo mientras realiza la reparación. Tiene todos los materiales necesarios a bordo, un plan detallado a seguir y un equipo de ingenieros de clase mundial que lo asesora. Por tanto, confiamos en su capacidad para completar la reparación. Nuestro objetivo es realizar las reparaciones necesarias de forma rápida y eficaz, para minimizar las millas perdidas y reanudar la regatera ”. Dijo Ross Daniel, director técnico de Alex Thomson Racing.

Habiendo estado en segundo lugar en la flota de 33 barcos durante el sábado, con un promedio de 16 nudos y unas 25 millas náuticas detrás del líder Thomas Ruyant, la pausa de Thomson ya le había costado 150 millas de Ruyant y Charlie Dalin (Apivia) que lo pasaron a 23 millas por barlovento en la medianoche de ayer.

“Suponiendo que Alex tarda 24 horas en efectuar una reparación y ponerse en marcha de nuevo, se reincorporará al grupo perseguidor con Arkéa Paprec, Initiatives Cœur y PRB, como compañeros, perdería bastante, ya que eso lo pondría a 1000 millas por detrás en el Cabo de Buena Esperanza. Pero también mirando la historia de la anterior edición de la Vendée, viró Cabo de Hornos 800 millas detrás de Armel Le Cléac'h, por lo que no está todo el pescado vendido' ". Sugirió Yoann Richomme , ganador de la última Route du Rhum en Class40 y doble ganador de La Solitaire du Figaro cuando fue invitado hoy en el programa Vendée Globe LIVE .

Hablando sobre la última generación de foilers, Richomme, reconocido como un técnico meticuloso, explicó: “Estos nuevos barcos son realmente difíciles de navegar, son realmente difíciles de diseñar y se estrellan contra las olas con mucha potencia, lo que es muy probable le haya pasado a Alex. Lo difícil es que sabemos que levantaronn un poco el acelerador en el sur en la última edición para preservar los barcos, y creo que lo harán de nuevo. Desde el escenario que estamos viendo, lo necesitan. Cuando estos barcos comenzaron a despegar, golpeaban los cascos un poco más atrás, pero ahora estos barcos son totalmente voladores poe la estructura de sus foilers, la mayor parte del tiempo, ahora son las proas las que golpean las olas, estas con 2-3 m de altura, el impacto en la proa es enorme y sabemos que muchos de los barcos en Francia tenían refuerzos en esta zona. Vimos a CORUM L'Epargne en septiembre con una reparación de dos semanas en su proa. Están descubriendo nuevos problemas y esperamos que hayan cubierto la mayoría de ellos ".

A las dos semanas del inicio de la regata en Les Sables d'Olonne hay muchas reparaciones, pequeñas y no tan pequeñas, críticas o casi accidentales, que el patrón debe hacer. Al contemplar el descenso hacia el Océano Austral, el líder, Thomas Ruyant (LinkedOut), tuvo que escalar dos veces el mástil de 28 metros de su IMOCA después de que se rompieran varias drizas. Los dos IMOCA principales, LinkedOut y Apivia, están uno al lado del otro a 10 millas de distancia, un mano a mano mientras caen hacia el sureste hacia un área de aire inestable, descrita por Dalin como 'ratonera' a través de la cual deben pasar para llegar a el Océano Austral y un rápido viaje hacia el este hacia la longitud del Cabo de Buena Esperanza.

Ahora la flota de Vendée Globe se extiende por más de 3000 millas, Jérémie Beyou, ha alargado su paso en el sur de Canarias. Escuchar a los patrones en las llamadas diarias o leer los mensajes enviados desde a bordo, sea cual sea la edad del barco o su posición, todos los días traen consigo su parte de problemas. Ayer fue una veleta para el noveno clasificado Sébastien Simon, hoy una reparación compuesta en una parte del pozo de foil para Armel Tripon en L’Occitane y esa semana una reparación de la vela mayor del japonés Kojiro Shiraishi.

Grandes o pequeños los problemas prevalecen.