Armel Le Cléac’h contraataca. Condiciones duras para la flota del Pacífico

Alessandro Di Benedetto celebra hoy sus 42 años con 41 nudos de viento. Pero el patrón del Team Plastique las ha visto más maduras y no es su estilo rendirse. Tras el sorbete de limón en el granizado del gran sur, ha probado hoy la sal del Pacífico para acompañar su foie gras de cumpleaños. Desde el comienzo de la carrera, Alessandro no ha perdido nunca ni pizca de alegría, sean cuales sean las circunstancias. Un buen humor comunicativo, realzado por su acento italiano impregnado de sol. Con él, las condiciones más grises o más oscuras se transforman al instante en deliciosas chispas de vida en el gran sur. El franco-italiano ha superado hoy la puerta de Nueva Zelanda, a más de 5.000 millas de los líderes…

¿Separación de tráfico?

630 millas al noreste de las Malvinas, a la salida del anticiclón de Santa Helena, Armel Le Cléac’h acaba de pasar al ataque. Justo antes del Directo del mediodía, el patrón del Banque Populaire, que navegaba ya de ceñida en un viento de noroeste, ha virado de bordo, diferenciándose así de su adversario. Desde la salida de la Vendée Globe, Armel tiene tendencia a preferir las rutas más cortas a las rutas más rápidas. Este fue el caso en el rodeo del anticiclón de Santa Elena durante el descenso del Atlántico, tras el paso de la puerta Crozet. Hasta el momento, esta estrategia siempre le ha sonreído. No hay razón, pues, para cambiar. Si su elección se confirma, tendrá varias viradas por avante a efectuar en este viento de noroeste que refrescará pronto hasta 25-30 nudos en las proximidades de una depresión tormentosa procedente de Uruguay. Por su lado, François Gabart (MACIF) persiste prosiguiendo su rumbo hacia el este. "Pasaremos cuentas en Brasil", aseguraba Le Cléac’h al mediodía. Mientras tanto, los dos tienen tela por cortar. Excepto en la pequeña jornada de respiro tras pasar el cabo de Hornos, no han bajado nunca el pistón. Armel No ha tenido ni siquiera el tiempo de afeitarse la barba de 30 días que luce bien densa…

Virbac-Paprec 3 y en menor medida Hugo Boss, aspiran a aprovecharse del laborioso avance de los dos de cabeza para resarcirse lenta pero seguramente. En cada actualización de datos, Jean-Pierre Dick reduce su separación: ha ganado 81 millas en las últimas 24 horas. Alex está más preocupado por las reparaciones a efectuar en su moribundo hidrogenerador. Para el marino británico es un imperativo: no tiene suficiente carburante para ser autónomo en energía hasta el final.

Sueños de mares planas

El resto de la tropa avanza a trompicones en el gran sur. Y todos albergan la misma esperanza: navegar en un viento ligero y sobre una mar plana. Detrás de SynerCiel, el club de los 5 ha franqueado la última puerta de seguridad del Pacífico. Pero su ruta al cabo de Hornos en el seno de una vasta depresión, está llena de baches. El viento inestable (25 nudos de media, con rachas de más de 35) obliga a los solitarios a maniobrar y hacer reglajes sin parar. Y la mar siempre alborotada, con olas de 4 de 5 metros que vienen de través. Jean Le Cam será el primero en salir de esta olla, el lunes por la mañana…

En este grupo, Stamm es de lejos el más rápido desde hace 48 horas. Después de haber doblado a Arnaud Boissières, se ha zampado de un bocado a Javier Sansó. El jurado ha recibido esta mañana el informe del barco ruso sobre el cual Cheminées Poujoulat se amarró en su escala en la isla de Auckland. Está analizándolo antes de tomar una decisión sobre una reapertura del caso.

Las cifras

François Gabart (MACIF) dobló el cabo de Hornos el 1 de enero de 2013 a las 18:20 TU (19:20 hora española) tras 52 d. 6 h. 18 m. de regata.

Armel Le Cléac’h (Banque Populaire) dobló el cabo de Hornos el 1 de enero de 2013 a las 19:35 TU (20:35 hora española) tras 52 d. 7 h. 33 m. de regata.

Jean-Pierre Dick (Virbac-Paprec 3). Paso del cabo de Hornos el 3 de enero a las 4:42 TU tras 53 d. 16 h. 40 m de regata.

Alex Thomson (Hugo Boss). Paso del cabo de Hornos el 4 de enero a las 2:38 TU tras 54 d. 14 h. 36 m. de regata.

Han dicho...

Ya estamos metidos de lleno en la borrasca que tenemos entre nosotros y Cabo de Hornos; el viento es muy inestable (entre 21 y 40 nudos), lo que hace bastante difícil encontrar un buen equilibrio. El viento está subiendo cada vez más la media y ya lo he tenido una hora sin bajar de 35 nudos pero luego entra en una fase que no sube de 22 nudos y luego vuelve a subir a 32-35 nudos sin ser chubasco. Nos quedan bastantes horas de esto y habrá que aguantarse.
La vida a bordo complicada pero bueno, se lleva… por primera vez en toda la regata he cerrado todos los compartimentos estancos y la escotilla de la entrada.
Ayer fue un día muy provechoso. Pude cargar baterías al 100%, cosa que ni hacia. Desde hacia unos 6 días llegaban casi al 97 pero no al 100 y tuve el hidro puesto varias horas para ayudar a las placas. Al final salió perfecto y entre los dos las baterías acabaron al 100% y también pude hacer agua con la potabilizadora.
Javier Sansó

sta parte de Atlántico entre el cabo de Hornos y Brasil no nada fácil a nivel estratégico. Las previsiones cambian bastante todos los días. Hace falta encontrar la mejor ruta para alcanzar los alisios a la altura de Brasil, y no es fácil.
(Sobre su barba densa) Las condiciones desde Hornos no son plácidas. Ha habido una depresión bastante formada, al portante en una mar alborotada. Las últimas 36 horas no han sido muy buenas. He estado siempre ocupado con cambios de velas, estibaje, trasluchadas... tenía otras cosas que hacer antes de afeitarme. Y además hay un momento en que uno se dice que haría falta dormir un poco; así pues ya veis que realmente no he tenido tiempo de afeitarme. Pero tranquilos, no llegaré a Les Sables con esta densa barba.
(Sobre su estrategia) estoy contento con mi posición. Se verá con el tiempo lo que da de si. Hago mi ruta, y no me preocupo demasiado de lo que hace François. Por ahora esto avanza, va bien, y ya haremos cuentas en una semana. La temperatura sube agradablemente: hace bastante fresco por la noche pero se nota que me acerco a zonas algo más cálidas.
Armel Le Cléac’h

Nos movemos un poco, no hay mucho viento, hay 32 nudos pero la mar es de través, bastante fuerte, 4 o 5 metros de olas, como en unos autos de choque.
Estas son realmente condiciones de gran sur. El cielo ha cambiado bastante, me encuentro a 1.400 millas del cabo de Hornos y me digo que es el último golpe de viento antes de llegar. Lo saboreo.
Bernard Stamm va aun así súper rápido respecto a nosotros cuatro (ndlr: él mismo, Javier Sansó, Dominique Wavre y Mike Golding). Tengo a Javier en el punto de mira de mi pantalla. A bordo todo se menea un poco pero va bien.
Arnaud Boissières