Alex Thomson, a un paso del podio. Jean-Pierre Dick decide mañana si sigue o si se para en la costa española
Al Hugo Boss se le espera mañana miércoles, a las 7 de la mañana, en el canal de Les Sables d’Olonne. Como sus dos predecesores, Alex Thomson tendrá que lidiar antes con la ira del golfo de Vizcaya: rachas de 40 nudos y olas de 5 metros. Una última prueba antes de la liberación. Al final del camino, al patrón británico le espera sin embargo una recompensa extraordinaria: el tercer escalón del podio como premio a una magnífica regata con un barco de casi 7 años.
El boss es Alex
Para Alex Thomson, de 38 años, la felicidad de cortar la línea de llegada en Les Sables d’Olonne será doble: no solo acaba su Vendée Globe, una regata que siempre se le ha resistido (tuvo que retirarse en 2008 y en 2004), sino que además se sube al podio. Será el tercer británico que lo consigue en esta vuelta al mundo en solitario, sin escalas y sin asistencia, y sucederá así a Ellen MacArthur en 2001 y Mike Golding en 2005. Además, es el único que se sube al podio de esta edición en un barco de antigua generación, un diseño Farr de 2007 (ex Estrella Damm).
Dick deshoja la margarita
Cuando Thomson escuche el bocinazo que signifique el final de su regata, Jean-Pierre Dick deberá haber tomado una decisión: sigue o no sigue su aventura hacia el puerto de llegada. Lleva ya ocho días (¡1.500 millas!) navegando en un barco sin quilla. El problema de Dick, a unas 150 millas de las costas portuguesas y algo más de 200 al sudoeste del cabo de Finisterre, no es superar el punto más occidental de España. Las condiciones meteorológicas se lo permiten. Su problema es el temporal anunciado para el viernes en el golfo de Vizcaya, mientras él esté aproximándose a la llegada. Dick debe evaluar por tanto muy exactamente la situación meteorológica y calcular sus posibilidades de llegar a Les Sables antes del mal tiempo. Con el agravante de que no puede acelerar, porque si iza más vela corre el peligro de volcar.
La gran barrera anticiclónica
Más lejos, al sudoeste de las Canarias, Jean Le Cam (SynerCiel) y Mike Golding (Gamesa), a 92 millas uno del otro, están perdiendo velocidad a medida que salen del cinturón de los alisios y se adentran en una dorsal anticiclónica. Tienen buen tiempo, quizás demasiado bueno, y esta situación amenaza con durar unos cuantos días. La barrera anticiclónica se extiende prácticamente a todo lo ancho del Atlántico y constituye una verdadera muralla en su camino hacia las costas francesas. Esta tarde, la progresión del Gamesa hablaba por sí sola de sus condiciones: apenas avanza a 3 nudos.
Esta misma barrera espera también a sus perseguidores, desde el Mirabaud al Votre Nom autour du Monde avec EDM Projets, pasando por el AKENA Vérandas, y el ACCIONA 100% EcoPowered de Javier Sansó. Después del Hugo Boss, y según lo que decida Dick, habrá que esperar al menos una semana para ver cómo los habitantes de Les Sables d’Olonne reciben como héroes al siguiente clasificado. Saben perfectamente que, se llegue en el puesto que se llegue, el simple hecho de terminar esta durísima prueba es todo un éxito.
Han dicho...
Los modelos no coinciden, habrá que tomar una decisión en firme mañana por la mañana. Estudio todas las posibilidades. A priori, hay un temporal el viernes por la mañana en Les Sables, por lo que hay el riesgo de encontrarse en una situación un poco delicada. Hay que mirar bien el timing para llegar allí. Lo verificaré. Pasaré el cabo de Finisterre, las condiciones parecen muy honestas. Tengo un viento de 20-25 nudos que me permite avanzar correctamente. Quería evitar el gran frente a la altura de las Azores y lo he conseguido. Es algo bueno, el barco es muy estable, de momento no he tenido ningún accidente, toquemos madera. Me acerco suavemente a la llegada, pero las últimas millas parecen las más difíciles. Intentaré reflexionar mucho antes de tomar mi decisión.
Jean-Pierre Dick (FRA, Virbac Paprec 3)
He pasado una noche horrible, con un viento que a veces rolaba 100 grados. Los ficheros meteorológicos dan informaciones totalmente fantasiosas, no me puedo fiar. Espero llegar a Les Sables d’Olonne el 7 de febrero, lo que supondría un tiempo bastante similar al de 2004. Pero no tiene nada que ver con mi regata del 2004 en cuanto a condiciones, fue mucho más agradable en 2004. Lo que han hecho Armel y François es increíble, y es lo mismo para los otros patrones, tanto del grupo de cabeza, como del nuestro o del de los de atrás. Todos nos reímos mucho cuando Denis Horeau empezó a hablar de una Vendée Globe en más o menos 76 días. ¡Pero por lo visto, a veces, dice cosas muy adecuadas! Sigo estando ocupado con mis problemas de los ficheros meteorológicos y ahora no pienso en Jean Le Cam. Estoy más concentrado en mi objetivo, que es llegar a Les Sables d’Olonne. Porque no se puede pensar en estrategia cuando uno está en condiciones como las que tengo actualmente.
Mike Golding (GBR, Gamesa)
En mi casa, hace muy buen tiempo. No puedo decir otra cosa, estoy en medio de una dorsal anticiclónica con vientos flojos, pero ya va bien después de todas esas horas difíciles. Da gusto vivir unos días donde no te sacuden. Puedo hacer inventario. Por ejemplo, por fin puedo saber si me queda suficiente leche para mi café (risas). Cada cual ha hecho una Vendée Globe distinta. El vídeo (ndlr: de felicitación a François Gabart y Armel Le Cléac’h) era un guiño sobre la velocidad de los barcos y el rendimiento de las personas. Hay un verdadero análisis de las cosas para comprender esta actuación. Han hecho una demostración extraordinaria, por lo que creo que volveré al colegio y les pediré que me den unas clases; ¿cómo se lo hacen en un ventarrón de entre 25 y 30 nudos para ir a 19 de media? Quiero hacerlo antes de morir. Voy a hacerlo cuando vuelva. Como de costumbre, tengo una dorsal delante de mí. Desde el cabo de Hornos ya estoy acostumbrado. Intento hacer el mejor rumbo posible con mis condiciones actuales. Había dicho que llegaría a Les Sables con el buen tiempo y creo que es lo que pasará. Ya sé que estáis hartos de mal tiempo. Yo os traeré el buen tiempo. Os hará sonreír. Pero tendréis que esperar a que llegue a Les Sables para tener buen tiempo. ¡Mientras no esté aquí, no hay buen tiempo! (Sobre el hecho de tener un británico delante [Thomson, 3º] y otro detrás [Golding, 6º]) Estoy entre dos rebanadas. ¿Y entre dos rebanadas de rosbif, qué hay? El pan va por fuera; entonces ¿qué hay? Es un bocadillo al revés: ¡han puesto el pan en medio y el rosbif encima y debajo (risas)! ¡Pues con un poco de mahonesa y ketchup, va que chuta!
Jean Le Cam (FRA, SynerCiel)
Tengo entre 30 y 40 nudos de viento, es más que desagradable. Creo que durará hasta esta noche y que después amainará un poco, unos 25-30 nudos. Después dependerá de las condiciones y de la velocidad que consiga mantener, pero creo que cruzaré la línea de llegada entre las 7 y las 9 de mañana por la mañana. Últimamente no he visto cargueros, pero supongo que veré cada vez más a medida que me acerque. Me he encontrado un pesquero, en cambio, pero demasiado cerca.
Alex Thomson (GBR, HUGO BOSS)