Arranca el Conde de Gondomar con mar y viento al mejor estilo marinero
Xplosion, Castrosua y Salseiro primeros barcos en tiempo real en puntuar en la mitad del recorrido
La flota se divide en los dos bordos posibles en la subida al Carrumeiro Chico
Arrancó el XXXV Trofeo Conde de Gondomar, y lo hizo al mejor estilo marinero, con viento del norte y poco más de un metro de ola. Treinta unidades en el agua que se inscribieron para esta primera prueba, la regata Martín Códax, y es que la dureza de subir a Fisterra se nota. Algunos más para las dos jornadas restantes.
Por delante 120 millas, con un viento que a las 11.00 horas, hora programada para el Top direccionaba del 020. Pero un repentino role de la componente, de más de 30 grados, obligó al Oficial Principal, Rafale Bonilla, a movilizar al balizador para reorganizar la boya de desmarque. Finalmente entabló del 340, con la baliza roja fondeada a 0,6 millas, muy próxima a Estelas. La intensidad era de 10,5 nudos.
Salida limpia a unos minutos de las 11.00 horas y algo de tensión en el primer paso, con toda la flota navegando muy agrupada y buscando las mejores opciones para ganar puestos en la línea de barcos que poco a poco comenzaba a estirarse camino de Carallones. A partir de ahí se formarían dos grupos. Los que optarían por el interior de las Islas Cies, hacia la Costa de la Vela, que fueron los menos, y los que navegarían por su exterior, buscando rumbos más abiertos, la gran mayoría de los barcos, todos ellos los de mayor capacidad vélica.
Problemas con los aparejos para el portugués Marías, que se tuvo que retirar al puerto deportivo de Portosín, ya en la Ría de Muros-Noia, cuando iba con el grupo de cabeza, y primeros participantes virando, después de 9 horas, el mítico Carrumeiro Chico, en pleno corazón del Seno de Corcubión. A la hora de redactar esta nota comenzaban a puntuar el Xplosión, de Carlos Mendonça; Castrosua – Carsa, de Willy Alonso; y Salseiro, de Manolo Blanco, que por este orden y en tiempo real, iniciaban su retorno a Baiona con vientos portantes, un nordeste, del 015, con 20 nudos de viento y puntas de 23. Tras ellos Turismo Ourense, de los Pérez Canal, y Pairo 8, de José Luís Freire, con Marga Cameselle a la caña. Más rezagados el resto de los barcos. Con el viento que proporciona esa velociad se hace complicado que en esta XXXV edición del Conde de Gondomar se logre batir el récord de la prueba Martín Códax, en poder del Zorongo y ya con bastantes años en sus vitrinas.
Mañana se conocerán los resultados de la regata larga, jornada de descanso la del viernes para todos los regatistas.