Recital de la clase 6M en la Arenal Cup 2 del CNA
Esta nueva regata creada por la flota de la clase 6M en la que han participado 8 embarcaciones y medio centenar de navegantes, ha tenido lugar del viernes 14 al domingo 16 de junio, pudiéndose realizar cinco de las seis pruebas previstas. La embarcación ganadora ha sido el Stella, de la armadora Violeta Álvarez.
S’Arenal, 17 de junio. El Club Nàutic S’Arenal (CNA) ha acogido este fin de semana la segunda edición de la Arenal Cup, una nueva regata creada por la flota de la clase 6M que, por segundo año consecutivo, ha elegido el club como base de entrenamientos de cara al próximo Mundial de esta prestigiosa clase.
El evento se ha desarrollado desde el viernes 14 al domingo 16 de junio, con dos pruebas programadas por día. El viernes fue la jornada con un viento más intenso, un ‘embat’ de entre 13 y 14 nudos, con rachas de hasta 16 nudos. El sábado estuvo marcado por un viento algo más suave, de entre 8 y 10 nudos. En cuanto al domingo, la regata empezó con retraso debido a la tardía entrada del viento, un ‘embat’ de entre 10 y 12 nudos, lo que impidió realizar una de las dos pruebas programadas. En total, se pudieron celebrar cinco mangas a lo largo de las tres jornadas de competición.
Ya el domingo, tras la celebración de las últimas regatas, la Arenal Cup 2, en la que participaron 8 embarcaciones y medio centenar de navegantes, se cerró con la correspondiente entrega de trofeos. La embarcación ganadora de la Arenal Cup 2 ha sido el Stella, de la armadora Violeta Alvárez.
Como circunstancia especial, las pruebas correspondientes al sábado se incluyeron como parte de la 45ª Regata Fuerzas Armadas, organizada ese día en colaboración con la Armada Española para cruceros y vela ligera (Optimist, Laser, Windsurf, Snipe, Vela Latina y 6M). De esta manera, la embarcación ganadora del día, el Ginkgotoo, del armador Jan Eckert, de bandera suiza, pudo recibir también su trofeo Fuerzas Armadas.
En el plano social, el club agasajó a las tripulaciones con una cena en el Restaurante del CNA, durante la cual pudieron degustar varias especialidades mallorquinas a modo de ‘variat’, con platos como frito mallorquín o albóndigas, seguidos de varias carnes a la brasa.
Hace pocas semanas, del 23 al 25 de mayo, se celebró en el club la Arenal Cup 1, con gran éxito. Fue la primera de las tres competiciones bajo esta denominación que tienen lugar estas semanas en aguas del CNA. Son recorridos barlovento/sotavento de una hora de duración cada prueba, celebrándose dos pruebas cada día, hasta completar un total de 6. La Arenal Cup 3, que cerrará el ciclo, tendrá lugar del 12 al 14 de julio. Las regatas Arenal Cup forman parte, junto a la Princesa Sofía y la PalmaVela, de las Mallorca Series de la clase 6M, un total de cinco pruebas con un podio conjunto final.
Es el segundo año consecutivo que grandes campeones de la prestigiosa clase 6M eligen el CNA para realizar sus entrenamientos. El año pasado, 7 embarcaciones procedentes de 5 nacionalidades diferentes (España, Suecia, Alemania, Reino Unido y Finlandia), con una tripulación de 5 integrantes hizo del club su base de entrenamientos, bregándose en regatas como el Trofeo Princesa Sofía o Palmavela y participando también, en aguas del CNA, en la regata Marinepool Summer Cup. Este año, ya son 10 las embarcaciones y medio centenar los navegantes que han hecho del CNA su base de entrenamientos de cara al mundial. Permanecerán en el CNA hasta mediados de julio, cuando se desplazarán a Sanxenxo, donde participarán en el Europeo de su clase a finales de septiembre.
“Es un privilegio tener a estos increíbles navegantes en el club, mostrándonos su maestría en regata”, valora Alex Duran, coordinador de eventos del CNA. “Es una pasada verlos navegar: como se suele decir, el más malo hace relojes”, indica Duran, quien incide en que “ya nos han confirmado que el año que viene volverán a tener su base de entrenamientos de invierno en el CNA, lo cual es un orgullo para nosotros”.
“El club es el lugar ideal para nosotros, con el mejor acceso a la Bahía de Palma, a 10 minutos de un aeropuerto muy bien conectado con cualquier país de Europa, unas instalaciones, condiciones e infraestructuras ideales y, sobre todo, con un trato exquisito, familiar y muy amigable”, destacaba Markus Wieser, tripulante de una de las embarcaciones.