Varias organizaciones marítimas proponen soluciones en asuntos clave relativos a la normativa de azufre de la OMI
El Subcomité de prevención y lucha contra la contaminación de dicha Organización se reúne el próximo 9 de julio en Londres
28/6/2018 - Varias de las principales organizaciones navieras internacionales, en representación del sector marítimo, han remitido a la OMI unos documentos con propuestas sobre las próximas normas sobre contenido de azufre en los combustibles marinos incluidas en el Anexo VI del Convenio MARPOL, con vistas al grupo de trabajo intersesiones del Subcomité de Prevención y lucha contra la contaminación, que tendrá lugar a partir del próximo 9 de julio en Londres. En dichos documentos, ICS, BIMCO, e INTERCARGO, entre otras, enumeran una serie de propuestas para evitar que estas nuevas normas penalicen injustamente a determinados buques de forma individual, o puedan poner en peligro su seguridad.
En total se han desarrollado y enviado un total de cinco propuestas, con el fin de facilitar la aplicación del nuevo límite de 0,5% de contenido de azufre en los combustibles marinos:
- La necesidad de preparar un formulario estandarizado para los planes de implantación específicos de cada buque, que incluya todas las comprobaciones necesarias para el cumplimiento de la norma y un llamamiento a los Estados miembros de la OMI para que apliquen un enfoque práctico y pragmático a la hora de verificar su cumplimiento;
- Analizar las implicaciones de seguridad asociadas a los posibles nuevos combustibles a partir de 2020 y sus respectivos riesgos;
- La preparación de un formulario modelo para notificar la falta de disponibilidad de combustibles que cumplan la norma;
- Propuestas de enmiendas al Anexo VI del MARPOL para exigir puntos de muestreo de los combustibles; y
- Discutir posibles problemas de verificación y mecanismos y acciones de control.
El sector hace hincapié en “el total compromiso del sector del transporte marítimo con el éxito en la aplicación del límite global de azufre el 1 de enero de 2020, y celebra los importantes beneficios ambientales que supondrá”.
Mediante sus propuestas para la aplicación de la normativa, los armadores y navieros de buques se comprometen a hacer todo lo que esté en su mano para cumplirla. Aun así, dicha aplicación será mucho más compleja que la introducción de las ECAS en 2015, por tratarse ahora de una norma global, la variedad de tipos de combustibles y las grandes cantidades involucradas (del orden de 270 millones de t).
En 2015, los buques que operaban dentro de las ECA empezaron a utilizar combustibles destilados según la norma ISO 8217 pero, a partir de 2020, para cumplir el límite de azufre del 0,5%, muchos buques optarán por usar mezclas de combustibles y nuevos productos que están fuera de esta norma, cuya revisión no está previsto que se publique antes de 2021. A esto hay que añadir posibles problemas de seguridad, potencialmente graves derivados de incompatibilidades entre combustibles.
El sector reconoce que, en un sentido legal, no habrá un período de transición en la aplicación de la norma y será necesario el suministro de combustibles reglamentarios y compatibles en los puertos de todo el mundo. Dada la magnitud de los desafíos técnicos que se afrontan y la probabilidad de que se presenten incidentes en un primer momento, será importante que las autoridades de control del Estado del Puerto apliquen un enfoque pragmático y realista durante los primeros meses.