LA UE aporta 16,9 millones a un proyecto de GNL para toda la cadena logística de una empresa finlandesa
La empresa finlandesa de logística Containerships ha recibido 16,9 millones de euros de la Unión Europea (UE) para implantar su estrategia ecológica, que consiste en la introducción del gas natural licuado (GNL) en toda su cadena de suministro logístico. Containerships pretende ser la primera empresa en Europa en establecer una cadena logística totalmente basada en GNL.
Esta empresa ha encargado a un astillero chino 4 buques mercantes propulsados por GNL, cuya entrega está prevista para finales de 2018. El próximo 7 de abril tendrán lugar las ceremonias de puesta de quilla del primer buque y de primer corte de chapa del segundo buque. Del total de la subvención, 10,7 millones de euros se destinarán a inversiones en buques y los otros 6,2 millones para el desarrollo de una red de terminales de GNL con otros socios implicados en el proyecto.
En concreto, Nordic Environment Finance Corporation (NEFCO), una institución dedicada a financiar proyectos ecológicos, invertirá otros 5 millones de euros en apoyar la estrategia medioambiental de Containerships en la región del Mar Báltico.
"La participación de la Unión Europea y NEFCO en el proyecto nos da un apoyo considerable para la construcción de la primera cadena de suministro ecológico en Europa", ha declarado el director general de Containerships Kari-Pekka Laaksonen.
Además de los nuevos buques, esta empresa también invertirá en camiones propulsados por GNL. Containerships ya opera más de 40 camiones que utilizan GNL como combustible y el plan es aumentar el número hasta las 150 o 200 unidades. También ha invertido en una estación de repostaje de GNL ubicada en el Reino Unido.
El valor de las inversiones realizadas por Containerships asciende a entre 150 o 200 millones de euros, incluidas las adquisiciones tanto para el tráfico marítimo como para el rodado.
Para Kari-Pekka Laaksonen, en un futuro las grandes corporaciones tenderán a utilizar cadenas de suministro libres de emisiones, siempre que sea posible. “Ser ecológico también es práctico desde el punto de vista comercial”, asegura Laaksonen.