Salón Náutico 2019: Rumbo a la sostenibilidad
La ecología tiene en el entorno marino uno de sus puntos más sensibles. Los campos de posidonia, las emisiones de gases, los antiincrustantes usados para la protección de los cascos de las embarcaciones deportivas y de recreo, la eficiencia en los consumos, las fuentes de energía alternativas y renovables…
Estos y algunos más integran en buena parte el largo sumario de temas a los que cada día la náutica de recreo, un prisma con multitud de aristas cuyo denominador común es la sostenibilidad, deberá prestar más atención.
En este sentido, el Salón Náutico Internacional de Barcelona, en tanto que centro de referencia y aglutinador de las diversas sensibilidades de la náutica deportiva y de recreo, y cumpliendo con su permanente compromiso para con el medioambiente marino, en esta edición de 2019 adopta el lema ‘Rumbo a la sostenibilidad’, una problemática en la que están trabajando activamente no pocos actores, como los astilleros, los fabricantes de equipos y motores, las distintas asociaciones empresariales como Anen y Adin, y las federaciones deportivas, las escuelas náuticas y las asociaciones de usuarios, todos cada día más conscientes de este acuciante problema.
En el contexto de esta problemática podemos destacar iniciativas y tendencias de enorme interés. Es el caso de los proyectos sobre el desguace y reciclaje de embarcaciones ya en funcionamiento en Francia y cuya posible implementación en España está ya estudiando la Asociación Nacional de Empresas Náuticas; la tendencia cada vez mayor por las motorizaciones eléctricas e híbridas; la búsqueda constante de mayor eficiencia en los motores de combustión; la investigación en substancias antiincrustantes no tóxicas para el medio marino; los avances en electrónica para minimizar el consumo de combustible y las emisiones de CO2 al medio; el empleo de luces led en la iluminación de a bordo; la reducción en el uso del cableado en los barcos, sustituido por conexiones inalámbricas; la mayor presencia de materiales ecológicos a bordo, como pueden ser las maderas procedentes de bosques sostenibles, o el uso de textiles naturales…
Si bien es cierto que en los últimos años ha crecido la sensibilidad en el mundo de la náutica de recreo, todavía estamos bastante lejos de alcanzar parámetros satisfactorios a este respeto. Sin embargo, cada temporada aparecen en los salones náuticos, y el Salón Internacional de Barcelona no es una excepción, interesantes aportaciones de la industria en los más diversos ámbitos.
Así, por ejemplo, en el mundo de los motores eléctricos podemos atrevernos con la predicción de que en pocos años las embarcaciones propulsadas eléctricamente serán tan habituales como los son hoy las motocicletas o los automóviles que circulan por nuestras carreteras y calles. No es solamente una cuestión de movilidad o de sensibilidad por el medioambiente, sino también de costes.
Propulsión eléctrica
Varios son los factores que propician la cada vez mayor presencia de los barcos de propulsión eléctrica. Por una parte, la náutica de recreo, salvo alguna excepción, siempre ha ido a remolque de la automoción. Los barcos han adoptado numerosos avances de los coches, sobre todo en lo que respecta a los motores y la electrónica. Y por la otra, la tecnología de las baterías está avanzando a paso de gigante, y esto favorece la adopción de los motores eléctricos que, ofrecen rendimientos de alta eficiencia si se comparan con los térmicos. Sin embargo, si bien el problema del almacenaje de electricidad se va solucionando, todavía resulta un inconveniente “pesado” por lo que respecta a las baterías, que además son caras.
Pero la inversión se compensa si comparamos los altos gastos de combustible que exigen los motores marinos para desplazar carenas por el agua, un medio que requiere más combustible por milla recorrida en el agua que en tierra. A este respecto en el Salón Náutico Internacional de Barcelona astilleros como Fountaine Pajot, que están desarrollando un catamarán totalmente eléctrico, o fabricantes de motores eléctricos como Torqeedo o Motor Guide, entre otros, mostrarán sus avances en la “electrificación” de la náutica de ocio, motores tradicionales de combustión, de dos tiempos y cuatro tiempos a gasolina, y también los turbodiésel han alcanzado niveles de consumo, emisiones y acústicos que, tan solo hace unos años, eran impensables.
Las normativas internacionales a este respecto, muy rigurosas, han obligado a los fabricantes a ir por delante de las restricciones, con las consecuentes ventajas para los usuarios y el medioambiente. En el salón de Fira de Barcelona, marcas de primer orden como Yamaha, Mercury, Suzuki o Yanmar, entre otras, mostrarán sus avances en este sentido, con novedades de toda la gama de potencias que, gracias a los nuevos desarrollos y a la electrónica se convierten en productos mucho más sostenibles.
Capítulo no menos importante en la náutica son los antiincrustantes, un terreno en el que grandes marcas presentes en Barcelona, como Hempel, ofrecen un catálogo de antivegetativos respetuosos con el mar y de alta eficacia, adecuando sus productos a cada tipo de embarcación.
Cabría preguntarse qué tiene que ver la electrónica con la sostenibilidad de la náutica de recreo. Si consideramos los distintos sistemas de autotrimado como Active Trim, de Mercury Marine, o el sistema Helm Master de Yamaha para las embarcaciones a motor, que pueden llegar a reducir el consumo hasta en un 30%; o las ayudas a la navegación y a la maniobra; o la domótica de a bordo, que optimiza el consumo eléctrico del barco, la gestión de las baterías y otros sistemas tenemos, pues, que los sistemas electrónicos contribuyen también de una forma u otra a la preservación del medioambiente marino.
También las principales marcas de este sector presentes en el salón Náutico de Barcelona, tales como Garmin o Raymarine, por citar algunas, muestran sus últimas propuestas en los más diversos equipos, adaptables a cualquier eslora y tipo de navegación. También en este apartado hemos de recordar las conexiones inalámbricas de a bordo, tales como wifi o Bluetooth, cada día más habituales, y que permiten ahorrar muchos metros de cableado, sobre todo en las grandes esloras, ahorrando en peso y en consumo.
El ahorro de la energía a bordo ha generalizado el uso de la iluminación con luces led en los barcos, los aerogeneradores, las placas solares y los hidrogeneradores, equipamiento indispensable en embarcaciones para largas travesías. También en este sentido, en el salón de Barcelona, la mayoría de expositores dedicados a los equipos y accesorios como Imnasa o Dismarina disponen de productos enfocados a la sostenibilidad en sus catálogos.
En suma, la próxima edición del Salón Náutico Internacional de Barcelona, que tendrá lugar del 9 al 13 de octubre en el Port Vell, será, además del mayor escaparate de la náutica de recreo y deportiva de España, el reflejo de la creciente inquietud por la protección del medio marino entre los navegantes, los aficionados y la industria.